Miopía: ¿qué es y cómo podemos hacer para intentar frenarla?
- 25/11/2022
La miopía es un error de refracción del ojo que provoca que las imágenes queden enfocadas delante de la retina y no sobre ésta. Es debida a una alteración en la anatomía ocular; el ojo es más largo, la córnea es muy curva o existe un cambio en la densidad del cristalino.
La forma más común de miopía infantil es la miopía axial, en la que el problema es que el ojo es más largo de lo habitual. Suele aparecer entorno a los 5-8 años y va progresando hasta la adolescencia, a medida que el tamaño del globo ocular aumenta. Hay algunos pacientes en los que incluso la miopía puede progresar en la edad adulta.
La miopía es la enfermedad ocular más frecuente, y su prevalencia va en aumento. Se prevé que en el año 2050 el 50% de la población mundial sea miope. Este hecho junto las complicaciones asociadas que pueden aparecer a lo largo de la vida de la persona miope (mayor riesgo de desprendimiento de retina, glaucoma, membranas maculares, baja visión…) hace que la miopía sea una de las principales prioridades para la OMS y que se estén llevando a cabo multitud de investigaciones entorno a sus causas, factores de progresión de la miopía y posibles tratamientos para frenarla.
Como resultado de estas investigaciones, a día de hoy, sabemos que la aparición y progresión de la miopía se ve afectado por factores genéticos, ambientales y ópticos. El factor genético, tener antecedentes familiares de miopía, no lo podemos modificar. Pero sí podemos realizar una intervención temprana, sobre los factores ambientales y ópticos, para intentar ralentizar el proceso de alargamiento del ojo miope, y con ello disminuir la cantidad potencial de miopía.
Intervenciones Ambientales/Conductuales
1. Pasar más tiempo al aire libre
Existe evidencia científica que nos dice que pasar más tiempo al aire libre reduce la probabilidad de aparición de la miopía. Sin embargo, aún no estaría claro que más horas en el exterior sea efectivo para retrasar la progresión de los niños que ya son miopes.
En base a esto, la recomendación sería pasar entre 10-14 h a la semana realizando actividades al aire libre, a la luz del día (paseos, deporte, excursiones, juegos…). En hijos de padres miopes es muy recomendable e incluso en niños ya miopes esta medida podría ser útil.
2.Reducir el tiempo de uso de dispositivos digitales/tareas cercanas
Se considera tareas cercanas a las actividades que se realizan a distancias cortas como leer, estudiar, usas móviles o tables, usar ordenadores, ver televisión, jugar a videojuegos…
Numerosos estudios demuestran que pasar más tiempo realizando tareas cercanas aumenta el riesgo de miopía. Una distancia de trabajo menor a 20 cm, es un importante factor de riesgo para la progresión de la miopía.
Se han comparado poblaciones con antecedentes genéticos de miopía muy similares que crecieron en diferentes entornos (urbano vs rural), y se ha demostrado que aquellos niños que crecen en entornos rurales tienen una menor prevalencia de miopía.
En base a esta evidencia es importantísimo limitar las horas de uso de móviles y tablets. Las tareas cercanas forman parte de la educación diaria de los niños y es importante que incorporen como hábitos de estudio:
- Realizar pausas (la recomendación es cada 20-30 min de estudio o lectura, realizar pausas de 20 segundos mirando a una distancia lejana)
- Mantener una distancia mínima de 40 cm con el texto y 50 cm con el ordenado
- Evitar malas posturas como tumbarse sobre el brazo mientras se lee.
3. Buena iluminación y mejor si es luz natural
Queda demostrado que realizar tareas de cerca con poca luz es un factor de riesgo para la progresión de la miopía. Por lo tanto, una buena iluminación es protector sobre la miopía, teniendo que evitar que los niños lean en penumbra.
Intervenciones Ópticas y Farmacológicas
A lo largo de la historia se han investigado tratamientos para ralentizar el crecimiento ocular del paciente miope. Actualmente disponemos de estas cuatro alternativas útiles para el control de la miopía:
- Colirio atropina diluida. Los estudios ATOM y LAMP han demostrado que la instilación de una gota de atropina diluida en la noche provoca cambios bioquímicos en retina y esclera efectivos para frenar el crecimiento del globo ocular.
- Lentes multisegmento para gafas con desenfoque periférico. Lentes diseñadas con una zona limpia de visión central, que proporcionan una buena visión al niño y alrededor de esta zona, se crean zonas de desenfoque hipermetrópico, que consigue ralentizar la elongación ocular y con ello la progresión de la miopía.
- Lentes de contacto de desenfoque periférico. Lentes de contacto blandas, de uso diurno, que proporcionan una visión central clara con desenfoque de la imagen periférica con el objetivo de frenar la progresión de la miopía.
- Ortoqueratología (Orto-K). Lentes de uso nocturno, mientras el niño duerme, moldean la corneal central, mejorando de manera temporal la capacidad de la córnea para enfocar la imagen sobre la retina y ver bien durante el día, a la vez que reducen la progresión de la miopía
Ante un niño miope, con rápida progresión sin duda hay que actuar. Es fundamental hacer revisiones de manera regular. En Pediatrics Lleida, la Dra. Lorena Solé especialista en oftalmología pediátrica, realiza el manejo y seguimiento de la miopía; estudia cada caso de forma individual para averiguar cuál es el mejor método, que se adapta a cada niño, para ralentizar la progresión de la graduación. Pide tu cita.
