Luz azul: qué sabemos sobre su impacto en la salud ocular
- 04/09/2023
La exposición a la luz azul ha aumentado seriamente en nuestro entorno desde la llegada de los diodos emisores de luz (LED) y, la proliferación de dispositivos electrónicos ricos en luz azul. Esto ha planteado preguntas, ¿la luz azul puede producir daños oculares? ¿los filtros de luz azul son útiles y necesarios para protegernos?. El objetivo de esta publicación es daros a conocer las conclusiones a las que ha llegado la evidencia científica a día de hoy.
La Luz Azul: definición y fuentes de exposición
La luz azul es una parte del espectro de luz visible que se encuentra en el rango de aproximadamente 380 a 500 nanómetros de longitud de onda. Se divide en dos categorías: la luz azul-turquesa y la luz azul-violeta.
La fuente más prominente de luz azul es el sol, que ayuda a regular la melatonina en el cerebro, activando nuestro ciclo circadiano, manteniéndonos alerta durante el día. Sin embargo, la iluminación artificial, especialmente la luz LED de color blanco, y las pantallas de dispositivos electrónicos (teléfonos móviles, tablets, ordenadores, televisores) emiten cantidades significativas de luz azul, especialmente la luz azul-violeta.
Efectos de la luz azul en la salud visual infantil
Aunque la luz azul es necesaria para funciones vitales, la exposición excesiva puede tener consecuencias negativas. En los niños la córnea, el cristalino y en menor medida el humor acuoso y vítreo, tienen menos capacidad de absorber la entrada de luz azul por lo que esta penetra en mayor intensidad en la retina. La exposición prolongada a la luz azul de pantallas digitales puede tener varios efectos perjudiciales:
- Alteración del Sueño: La exposición a la luz azul durante la noche puede suprimir la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño. Esto puede afectar el patrón de sueño de los niños y contribuir en una peor calidad del sueño.
- Riesgo de Degeneración Macular (daño en la retina): Actualmente, no hay evidencia de que los LED en uso normal a niveles de intensidad doméstica o en dispositivos electrónicos sean tóxicos para la retina del ojo humano. Sin embargo, actualmente se desconocen la toxicidad potencial de la exposición acumulativa a largo plazo y el efecto dosis-respuesta. El brillo de las pantallas es 100 veces inferior a las dosis que podrían resultar peligrosas. Por otro lado, el efecto acumulativo de esta exposición podría conllevar potenciales secuelas a largo plazo. El tiempo que pasamos frente a las pantallas sería el principal determinante. La pregunta es si estas dosis tan bajas durante tiempos de exposición diaria muy largos y durante toda la vida pueden ser perjudiciales. Se necesitan más estudios en el futuro para comprender mejor los posibles efectos a largo plazo de la luz azul. Sin embargo, hasta la fecha no hay evidencia de que los LED, en uso normal a niveles de intensidad doméstica, o utilizados como retroiluminación de pantallas de ordenador sean retinotóxicos.
Medidas de prevención y educación visual frente a la exposición excesiva a la luz azul
Los oftalmólogos infantiles desempeñamos un papel crucial en la educación de los padres y cuidadores sobre los riesgos de la exposición excesiva a la luz azul y en la recomendación de medidas preventivas:
- Limitar el Tiempo de Pantalla: Es fundamental establecer límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos. La Academia Americana de Pediatría recomienda que los niños menores de 18 meses eviten el uso de pantallas digitales, y que los niños de 2 a 5 años limiten su exposición a una hora al día. Además, el Grupo de Investigación Erasmus sobre Miopía recomienda no más de 1 h al día para niños de hasta 5 años y 2 h como máximo al día para niños de 5 a 12 años.
- Filtros de Luz Azul: Algunos dispositivos ofrecen configuraciones de filtro de luz azul que reducen la cantidad de luz azul emitida. Actualmente no hay evidencia de un efecto beneficioso de lentes bloqueadoras de azul en las gafas para la prevención de enfermedades oculares, en particular la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) o la prevención de la fatiga visual informática. Se necesitan grandes ensayos aleatorios a mediano y largo plazo (al menos 2 a 3 años) para demostrar este posible efecto preventivo de las lentes con bloqueo azul.
- Descansos Visuales: Los oftalmólogos aconsejamos la regla "20-20-20": cada 20 minutos, mirar a una distancia de al menos 20 pies (aproximadamente 6 metros) durante al menos 20 segundos para descansar los ojos.
- Ambiente de Sueño Saludable: Evitar la exposición a dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarse puede ayudar a mantener la producción de melatonina y mejorar la calidad del sueño.
- Favorecer la iluminación doméstica “blanca cálida” y evitar el uso de luces que emitan luz blanca fría (con fuerte componente azul) en espacios con niños.